viernes, 31 de octubre de 2008

Buena Copa

En un blog donde se mezclan el vino y el fútbol el símil entre la Copa del Rey y una copa de vino está más que servido. El post de hoy aprovecha precisamente esto, porque voy a comentar algunas cosas del partido de dieciseisavos de Copa del Rey que enfrentó a Athletic y Recreativo en San Mamés.

En esta ocasión, y van unas cuantas esta temporada, pude seguir el partido a la antigua usanza, es decir, gracias a la inestimable ayuda de Radio Euskadi. En Navarra no hay forma humana de ver GolTV y la emisora del grupo EITB es la única que da el seguimiento más o menos íntegro de todos los partidos del Athletic por estos lares.

Esta vez no me rompí la cabeza contra la pared ni tuve un ataque de ansiedad por saber qué es lo que pasaba. La sensación, de tranquilidad incluso en los peores momentos del partido, tal vez gracias a no ver lo que estaba pasando.

Comentemos lo positivo, que para eso ganó el Athletic:
  • El resultado: 2-0. Encarrilada la eliminatoria, aunque debemos pasar por el Colombino para demostrar que queremos seguir hacia la siguiente ronda. Sobre todo cabe destacar ese marcador a cero en casa que es clave en las eliminatorias a ida y vuelta.
  • El equipo resultó mucho más vertical, hiriente en el ataque, pese a que el centro del campo estuvo ocupado por dos medios centros contundentes (o tal vez gracias a eso mismo).
  • El banquillo sirve para algo. Respecto a los titulares habituales de los últimos partidos nos encontramos con: Ustaritz, Koikili, Gurpegi, Javi Martínez, Susaeta, Ion Velez. Como suplentes también entraron dos hombres con pocos minutos esta temporada: Iñigo Vélez de Mendizabal y Joseba del Olmo. ¿Debería plantearse Caparrós que algo está haciendo mal a la hora de elegir las alineaciones iniciales?
  • Se ha roto una racha de derrotas demasiado larga. Tal vez esto propicie un cambio de actitud.
En definitiva, no puedo quedarme con lo que otros consideran malo. No acabo de entender por qué se critica que no machacaran a un equipo con el que sólo fuímos capaces de empatar hace no muchas semanas. Tal vez nos estemos volviendo a olvidar de dónde venimos y haya gente que esté pensando en jugar la final de la Copa sin pasar antes por la vuelta de esta eliminatoria.

Yo, de todas formas, digo lo de siempre: ¡Aupa Athletic!

miércoles, 29 de octubre de 2008

El momento del cambio

He tardado algo en escribir sobre el partido del pasado domingo en Madrid. La verdad es que no parece que haya mucho que decir después de todo lo que se ha hablado. Al final, el resultado fue negativo. Perder,  aunque sea con un grande y haciendo un bonito juego no debe alegrarnos jamás. Me parece que cada día nos estamos volviendo menos exigentes con el equipo, es como si pensáramos que no da para más.

Ahora mismo vamos a plantear otra forma de actuar. Espero poder ser coherente con la misma de aquí hasta el fin de la temporada. El planteamiento será el siguiente en mis próximos posts: si el Athletic pierde, sacaré a relucir sus defectos, a pesar de que pueda haber jugado bien; si gana, a parte de los comentarios de euforia, sacaré a relucir sus virtudes; en caso de empate, ya veré, al libre albedrío.

Empiezo por el partido del domingo, como primer ejemplo.

Una defensa mal coordinada propició dos de los tres goles. Estos fallos en la salida al fuera de juego o en las coberturas nos están costando la sangría de goles de la que estamos siendo víctimas en este comienzo de temporada.

El tercero, debido a una chulería innecesaria en el centro del campo. La relajación es buena a la hora de crear juego con libertad, pero demasiada, como siempre, puede ser catastrófica.

Está claro, hay algunos puntos de mejora que es de suponer que se tendrán en cuenta para el encuentro de esta noche en la Copa: coordinación, concentración y tensión. A ver si se van aplicando el cuento.

Con esta van dos entradas en las que no hablo sobre vino. La verdad es que no he probado nada nuevo últimamente. Estoy preparando una sobre la elaboración de vino con algunas fotos de bodega... espero tenerla lista pronto.

lunes, 20 de octubre de 2008

Sensaciones

Sensaciones. Es lo que me comprometí a comentar sobre los partidos de fútbol del Athletic. Sensaciones. Es lo único que puedo transmitir cuando el equipo parece que juega bien, pero no es capaz de marcar, ni siquiera de meter miedo real al equipo contrario.

Ayer nos enfrentamos ante uno de los verdaderos cocos de la categoría. El F.C. Barcelona vino, vio y venció. Sin grandes alardes y con la ausencia de figuras clave, fue capaz de llevarse un resultado más que positivo con un sólo gol.

Y nosotros, ¿qué? Sensaciones. Sólo podemos sentir el frío de la zona de descenso rozándonos la nuca. El equipo juega bien, mucho mejor que en las últimas campañas. Divierte su juego y nos regocijamos al ver que algunos jugadores que antaño parecían indolentes, se dejan la piel tanto en defensa como en ataque. Al menos, eso sí, estamos recuperando carácter. Sólo nos falta certificarlo con goles.

El próximo fin de semana nos toca visita a Real Madrid. ¿Seguiremos sufriendo?¿Acabaremos la jornada en la zona de descenso? Todo está por ver. De mientras, un grito tiene que seguir saliendo de nuestras gargantas: ¡Aupa Athletic!

miércoles, 15 de octubre de 2008

IEC #12: Un vino de Otoño

Siguiendo la senda trazada para la duodécima edición de Iberoamérica en Cata, esta vez por Joan Gómez Pallarès, presento un vino que he elegido como mi vino de otoño por tres motivos:
- La época del año en que lo compramos
- La época del año en que lo hemos disfrutado
- Los recuerdos que nos trae de esas vacaciones otoñales con paseos por las Rias Baixas, la ruta de los molinos de Ribadeume, la laguna de Costoia... y tantos otros sitios dignos de ser disfrutados en Galicia.

Martín Códax fue un juglar gallego, posiblemente de Vigo, que vivió entre mediados del siglo XIII y comienzos del siglo XIV. ¿Quién le iba a decir que siglos más tarde le pondrían su nombre a la bodega más grande de la D.O. Rias Baixas? No estoy muy seguro, pero tal vez, este juglar escucho y hasta hizo sonar algún Organistrum.

Hace algo menos de un año, antes de empezar a escribir esta bitácora, Mi Cuadrilla y yo estuvimos unos maravillosos días visitando tierras gallegas. Además de probar algún manjar que nunca habíamos degustado (ostras, zamburiñas...), aprovechamos para regar esas exquisitas viandas, con los vinos más diversos, desde ribera sacra hasta albariño pasando, como no, por el nunca suficientemente apreciado vino turbio ribeiro.

Tuvimos la suerte de elegir una preciosa casa rural en el pueblo de Cambados a un pequeño paseo de las bodegas Martín Códax, referencia en cuanto a albariño para los no entendidos en el tema. Hay que reconocer que, además de la producción, algo bueno hacen en cuanto a su distribución, ya que todos conocemos esta bodega.
Después de una visita guiada de lo más amena, nos dieron a probar los vinos de D.O. Rias Baixas que se producen en Cambados. Entre ellos destacaron, y de qué manera, un albariño fermentado en barrica y otro obtenido de uvas botrutizadas, recogidas una a una.

Repito, casi ha pasado un año y hace unos pocos días, teníamos unos langostinos dispuestos para ser preparados al modo tradicional, a la plancha, con sal y limón, ¿para qué más? Teníamos que acompañarlos con algo y tuve que quitar un poco de polvo acumulado en una caja que rezaba "Organistrum Colleita 2005". Se trata de la botella 21013 de 29667, para los que aprecien este tipo de información. Tenía muy claro que ese era el vino fermentado en barrica de Martín Códax que habíamos comprado en la propia bodega por unos 18€.

Con 13º de alcohol y apto para ser consumido entre 11 y 12ºC, lo primero que observamos al caer el vino en la copa es que su color se difiere algo del albariño tradicional. Deja atrás el amarillo pajizo para devolver reflejos dorados, en un vino cristalino, sin impurezas. En nariz demuestra carácter cítrico (mandarinas), pero tiene ciertos aromas especiados que sacan a la luz la madera por la que ha pasado. En boca, aunque esperábamos un aguijonazo de acidez, 
resulta mucho más redondo, embaucador, dulce con un ligero amargor final, como diciendo que quiere permanecer en el tiempo. Trago muy largo, casi demasiado fácil de beber, que nos permite terminar con la botella a la vez que terminamos con el último de los langostinos. No se trata de un albariño al uso, por los que los puristas pueden mostrar alguna crítica, pero está bien que ciertas bodegas se olviden de vez en cuando del tema exclusivamente comercial y nos presenten estos detalles.

Por cierto, comprobé en casa que me queda una botella de Castillo de Ferfiñanes, también fermentado en barrica, comprado con ocasión del mismo viaje. No sé cuando, pero seguro que retomo esta entrada cuando alguna ocasión, especial o no, me sugiera abrirla y decida hacer una comparativa entre ellos. Seguro que nos sorprende.

lunes, 13 de octubre de 2008

Fin de Semana Ecológico en Olite (II)

Este año ha habido alguna variación respecto a lo habitual en el Fin de Semana Ecológico. A parte de los habituales puestos con productos derivados de la agricultura y ganadería ecológica: quesos, aceite, zumos y, por supuesto, vino; nos hemos encontrado con la presencia de bicicletas eléctricas, coches híbridos y paseos en calesa, que aportan un componente ecologista a la fiesta.

El sábado, tal y como teníamos previsto, Mi Cuadrilla, yo y otras treinta personas asistimos a la charla-cata de vinos ecológicos compartida por Migeltxo Goñi (profesor de cata) y Pedro Dimas Rodeles (presidente de Bodegas Vega del Castillo). 

Pedro empezó explicando las diferencias entre un vino ecológico y un vino convencional. En resumen, el producto final es el mismo o muy parecido (indistinguibles). La diferencia se encuentra en la viticultura y la elaboración, donde el uso de productos químicos es mucho más restrictivo. Aún así, no dudó en afirmar que "el vino ecológico es mucho más sano".

Migeltxo se encargó de poner la parte técnica de una forma didáctica y amena. Tras explicar los conceptos básicos de cata se comenzó la cata de los siguientes vinos, todos pertenecientes a Bodegas Vega del Castillo:
- Auzolan Rosado Lágrima 2007: 100% Garnacha. Teniendo en cuenta la época del año en que nos encontramos, la evolución de este rosado es más que correcta. Conserva un rosa vivo pero empiezan a aparecer anaranjados en el ribete. Con aromas a frutos rojos algo maduros, en boca mantiene la acidez y el frescor.
- Auzolan Joven 2007: 100% Cabernet Sauvignon. Las uvas se recogieron en el grado óptimo de madurez, casi sobremadurado. Con esto se trató de evitar esos aromas a pimiento verde que tan desagradables resultan a algunos. Puedo afirmar que se consiguió. Se presenta de un color morado oscuro, bien cubierto. Frutos negros en nariz, hacen presagiar un vino agradable para beber, incluso sólo. En boca se nota la variedad de donde procede, pero sin dejártela seca.
- Auzolan Crianza 2005 "Llavero": 100% Cabernet Sauvignon. Procedente de una viña protegida del cierzo por la sierra de Guerinda, a una altitud considerable, de bajísima producción natural, menos de 1Kg por cepa, debida al "secano terrible" de esta finca en palabras de Pedro Dimas. Color picota madura con ribete granate-rubí y capa media-alta. En reposo, mucho aroma a madera, casi demasiado, que desaparece pronto en el momento en que se mueve. Aparecen frutos negros maduros y madera bien ensamblada. En boca, muy suave y redondo, pasan minutos para que se vaya el recuerdo. Un detalle, ninguno de los que estábamos en la cata (incluido Migeltxo) habríamos dicho que era monovarietal de Cabernet, ya que le habríamos asignado una generosa proporción de tempranillo.

Busca y compara. Seguro que encuentras algún vino ecológico que te agrada.

martes, 7 de octubre de 2008

Fin de Semana Ecológico en Olite


Cualquiera que se haya dado una vuelta por este blog se habrá percatado de que Olite es el centro de muchas actividades a lo largo del verano: Festival de Teatro Clásico, Fiesta de la Vendimia, Fiestas Patronales, Fiestas Medievales... La justificación es clara, el marco para estos eventos es el ideal y su situación en el centro geográfico de Navarra lo hace fácilmente accesible de cara a pasar una jornada cerca de casa.

Hace cuatro años, se empezó a hacer la "Semana Ecológica en Navarra" para promocionar los alimentos cultivados según las extrictas normas de la agricultura y ganadería ecológica y los elaborados a través de estas materias primas. El centro principal de actividades es, por supuesto, Pamplona, la capital, pero durante el fin de semana, desde la segunda edición, las actividades se trasladan a la capital de verano del Reyno: Olite, ¡cómo no!

De momento, Mi Cuadrilla y yo ya nos hemos apuntado a la Cata de Vinos Ecológicos del sábado. Daré cumplida cuenta de lo que en ella acontezca.

Podéis descargar el programa de la página del Colectivo Ordago.

Jugar a la Lotería

Viajar a Sevilla cuando los meses de más calor han pasado puede ser lo más recomendable. Buen clima, buena gente (menos cuando nos tiran botellas) y buen ambiente. Se puede visitar la Giralda, la Catedral y, para los muy taurinos, hasta la Maestranza. Cerveza y tapa, fino y tapa... El menú está decidido. ¿Verdad que es un buen plan para un fin de semana?

Bueno, esto es cierto para todos menos para los jugadores del Athletic. Este fin de semana, y van ya unos cuantos años así, se han tenido que volver con la cabeza gacha pensando en que podían haber perdido por algo menos.

Que levante la mano el que pensaba que el Athletic se iba a volver con algo más de cero puntos. Vale, yo siempre tengo la esperanza, pero también espero que me toque la lotería cuando juego y, ¡qué casualidad!, no me toca, no me toca. Pues el domingo, tampoco nos tocó la lotería frente a uno de los equipos más fuertes defensivamente (pese a los tres que recibieron contra el Sporting) y que no perdona en el ataque. Por algún motivo está y seguirá en la zona más noble de la tabla.

Cuatro goles recibimos el domingo. Cuatro, como cuatro soles. Todos y cada uno de ellos por errores defensivos: mala concentración, exceso de confianza, mala colocación en el campo, falta de contundencia... llamémosle como queramos.

Y lo peor no es esto. Lo peor es que tampoco hubo para más, para la esperanza frente a lo que se nos avecina. Bueno, luego llegará noviembre y en diciembre, la lotería de navidad. Tal vez nos toque.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Y después de fiestas...¿qué?

Han pasado algo más de dos semanas desde mi último post. Parece que, después de las fiestas de Olite, me he metido debajo de una piedra y no quiero volver a salir. No es realmente así, pero no quiero andar excusándome como cada vez que me retraso en escribir por aquí.

Intentaré hacer un resumen de lo acontecido desde la última vez que me digné a escribir.



Respecto al Athletic, no haré las crónicas de cada uno de los 4 partidos que se han jugado. Solamente las sensaciones que me produjo cada uno de ellos:

Málaga 0 Athletic 0: Un punto en el campo de un rival sin pegada. Poca recompensa para menos trabajo. Aburrido hasta decir basta.
Athletic 2 Valladolid 0: renace la esperanza. Por fin hemos encontrado un lateral izquierdo (Balenziaga) que parece que va a acabar sobre las dudas sobre esta demarcación. En todas las líneas fueron más que correctos.
Recreativo 1 Athletic 1: buena capacidad de reacción en un partido sin mucho más. Pese a que el Recre se adelantó en el marcador en el minuto 27 de la segunda parte, el Athletic reaccionó (no quitemos mérito a los cambios de Caparrós) y empató en sólo cuatro minutos. Yeste, que salió como suplente, demostró que todavía nos puede gustar.
Athletic 0 Getafe 1: dolorosa derrota. Cuando un equipo juega bien y pierde, la derrota escuece más de lo habitual. Por lo menos vimos a un buen equipo que generó hasta 13 oportunidades de gol.

Ahora, después de una etapa llana en la que no hemos ganado más que una meta volante, nos toca otra mucho más dura, con cuatro puertos de categoría especial (Sevilla, Barcelona, Real Madrid y Villareal). Espero que se me perdone el símil ciclista, pero, de tanto escucharlo, a uno se le pega todo. De todas formas: ¡Aupa Athletic!



Poco se puede decir sobre catas de vino durante unas fiestas. En fiestas, el vino se disfruta, no se degusta. Normalmente, la cantidad ingerida interfiere en el criterio y el vino más peleón puede llegar a rivalizar con un reserva con muchos puntos del somelier profesional que escojáis. De forma que no voy a introducir ninguna nota de cata hoy, aunque tengo preparada una que publicaré en el momento que recopile las fotos adecuadas. Además, estoy preparando otra entrada sobre la elaboración del vino, muy a tono con la época del año en que estamos.

Por otro lado, Joan Gómez Pallarès cumple con la obligación autoimpuesta de organizar la duodécima edición de Iberoamérica en Cata. En esta ocasión, se trata de localizar el vino de otoño: ese vino que nos inspira en esta época del año. Tema muy libre en el que puede surgir de lo más triste a lo más alegre pasando por cualquier estado intermedio. Espero participar, todavía le estoy dando vueltas al asunto.